viernes, 1 de enero de 2010

Entre los angeles

Las doce uvas no aparecieron por ninguna parte. Ni falta que hacía. Mi presencia en el lugar de la entrega de los oscars bastaba para celebrar este gran momento.

No hay alcohol. Ni drogas. Ni familiares ni amigos. Ni mi pais. Ni el lenguaje es el español.

Estoy en Hollywood, y hoy, tras cenar en un restaurante como un señor, he celebrado el 2010 delante de la alfombra roja en la estrella de Nicole Kidman. La fiesta no cuesta cincuenta dólares fuera; la fiesta es gratis dentro de mi cuerpo. Parece que la espera ha sido en vano, y todo parece muy ordinario--- pero no es verdad, lo que pasa es que esto antes lo habia soñado tal como es.

Vagabundos, borrachos, bugatis, pandas de negros farfullando, latinos, policias, porteros de discoteca, todos pasaron por delante de mi mirada atónita y sensible.

Asi, 20 años, en Teatro Kodak de Los Angeles, de verdetequieroverde, celebrando una nueva década con Yohan...solo ocurre una vez.

Paz

1 comentario:

  1. lo increíble se hace ordinario a veces.

    blizzards blizzards

    (M)

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